Un desperdicio de materia prima de sub productos que aún se consumen también es un reto de la industria del slow fashion o lo que llaman diseño sostenible debería apoyar.
“NO DEBEMOS OLVIDAR QUE EL CONSUMO DE CARNE PRODUCE DESPERDICIOS”
El crecimiento de las exportaciones en España ha contribuido a que el déficit en el comercio haya cerrado el año 2012 con las mejores cifras, desde la entrada de España en el euro. Concretamente, el déficit comercial se situó en 30.757,4 millones de euros, un 33,6% menos que el año anterior.
Las exportaciones han sido fundamentales para la economía española en los últimos meses y han podido amortiguar la debilidad del consumo interno. En una sociedad con una tasa de paro que está por encima del 26%, el consumo interno ha disminuido bruscamente y las empresas buscan otras posibilidades en otros países.
La crisis ha beneficiado a prestar atención en la competitividad. Los salarios han descendido y el precio de los productos también. Sin embargo, el consumidor es cada vez más exigente y valora prioritariamente la calidad del producto y el origen.
Exportaciones:
España es reconocida con productos de gran prestigio internacional, a pesar de la descentralización de sus producciones en países menos desarrollados y más económicos.
Por ejemplo, la ganadería de ovinos genera productos cárnicos de gran circulación internacional, se estima en más de U$S 50.000 millones al año. En 2012 se exportaron 2.229,6 millones de euros en carne
En el siguiente gráfico podremos observar cómo han aumentado las exportaciones de los productos cárnicos en el año 2012:
Fuente: FAO 2012. (Organización de las Naciones Unidas para la alimentación y la agricultura)
En nuestro país, este complejo industrial, tiene una antigua tradición histórica y está muy integrado al comercio internacional.
Los agentes de comercialización y fabricantes han innovado en redes de producción y empresas de abastecimiento.
Lo que pueden surtir varios países y regiones, lo que ayuda a que España pueda integrarse en el sector a nivel mundial.
Para posicionarse y consolidar nuevas porciones de mercado, el sector de la ganadería española de cordero está conformado a nivel nacional, subregional y regional.
Productores de ovejas:
Dentro de la UE los mayores productores de ovejas son: el Reino Unido, España, Rumania, Grecia, Italia y Francia.
El principal país productor de cabezas de ovino es el Reino Unido con 21,2 millones de cabezas de ovino y participa en la UE con un el 23,8%.
España ocupa el segundo lugar con el 22% y un censo aproximado a los 20 millones de cabezas.
Por comunidades autónomas Extremadura, Castilla- León, Castilla La Mancha, Andalucía y Aragón tienen las mayores cabañas, representan el 80% del total.
Según la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la alimentación y la agricultura).
La faena mundial de ovinos llegó a los 298,9 millones de cabezas durante el 2004, registrando un descenso en los dos años siguientes.
Habiendo pasado a 290,6 millones en 2005 y a solo superar los 283 millones de cabezas en 2006.
Esto se revirtió en el 2007, en donde se faenaron 287 millones de cabezas de ganado.
España ha utilizado el cordero merino a lo largo de la historia como un recurso nacional y único.
Las asociaciones de granjeros desarrollaron sus sellos de denominación de origen y han sido reconocidos a nivel mundial.
Así, en el 2012 se exportaron 2.229,6 millones de euros en carne.
Subproductos:
Los cueros y pieles se obtienen como productos secundarios de la industria de la carne.
Su producción está condicionada por la faena de animales para la obtención de carne, sus precios dependen de la industria cárnica.
El sector del calzado y complementos ha logrado un gran prestigio internacional a pesar de la descentralización de sus producciones en países menos desarrollados y más económicos.
Durante el primer semestre de 2013 se vendieron en el extranjero 74,7 millones de pares valorados en 1.154 millones de euros.
La cantidad de pares exportados es un 0,14% menos que en 2012 pero la calidad del producto.
Lo que ha permitido aumentar la facturación de las empresas del sector.
Según informó la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE, 2013).
El sector de la peletería
Está siendo impulsado por la mayor demanda en los mercados asiáticos con una subida del 5% respecto al 2012, un total de 5,6 billones de dólares.
Las pieles también se cotizan a precios record en las subastas.
Las ventas en Asia son de 5,6 billones de dólares, el 35% del total mundial.
Le sigue Europa con una venta de 4,4 billones de dólares, el 28% del total mundial.
En último lugar Eurasia (Rusia, Turquía, Ucrania, Kazajstán) con 4,3 billones de dólares, el 27,5% mundial.
América del Norte y Sur distan de éstas cifras con una venta de 1,2 billones de dólares, un poco más del 7 % del total mundial.
A pesar de estas cifras, numerosas peleterías, talleres de confección y curtición han cerrado o están trabajando bajo mínimos.
El sector del curtido:
En la Unión Europea y también en España el sector del curtido presenta en los últimos años una tendencia regresiva en su actividad.
Las normativas acerca del cuidado y protección del medio ambiente son cada vez más estrictas y requieren de una inversión demasiado alta para la situación actual.
Muchas empresas han dejado de contaminar en España, pero se han trasladado a otros países con normativas menos extrictas.
En la siguiente tabla se muestran datos sobre la producción en España de curtidos:
| Tipo | 2003 | 2004 | 2005 | 2006 | 2007 |
| Doble faz | 3369 | 2897 | 2723 | 2859 | 2050 |
| Ovino sin lana | 9927 | 9331 | 8118 | 7550 | 7248 |
Fuente: puesta en valor de lanas y pieles de producción nacional MARM
La producción global de cueros ovinos pasó de 7.548.772 toneladas en 2004, a 7.630.970 en 2005, 7.649.581 en 2006.
Finalmente, 7.640.474 toneladas en 2007, como se observa en el gráfico siguiente.
El consumo de piel animal:
Es curioso destacar que si bien el consumo de carne de estos animales ha proliferado, la producción de las pieles de estos animales en España ha disminuido de manera vertiginosa.
Sin embargo no dudamos en comprar chaquetas de vaca, cordero y cerdo en Inditex o cualquier otra multinacional de ropa o calzado que producen con animales que han sido sacrificados en otros países para su consumo interno.
Un desperdicio de materia prima de sub productos que aún se consumen también es un reto de la industria del slow fashion o lo que llaman diseño sostenible debería apoyar.